🇦🇷 Hockey Subacuático en Argentina. Cosa de locos… bajo el agua

Parece un día de rutina en el natatorio Jeannette Campbell del CeNARD. Parece, pero no lo es. Porque esta vez no manda la natación. Se juega el Campeonato Argentino de hockey… subacuático. Sí, bajo el agua, con palos chiquitos, bocha de plomo, arcos, árbitros y unas ganas bárbaras de pasarla bien.

Pueden parecer un mar de locos estos 12 equipos y estos 130 jugadores que llegaron de Santa Fe, San Juan, Mendoza, Berisso, Pilar y varios barrios porteños para participar del torneo más numeroso de la historia en Argentina. Pero al verlos buceando en apnea con un snorkel en su boca y antiparras en sus ojos, y al escucharlos en plenitud con esta disciplina, hay aroma a pasión.

Matías Biosca tiene una empresa familiar que fabrica repuestos para autos y juega al «hockey sub» desde 1998 en Dragones. «Es ideal para el que le gusta el agua, para el buceador o para quien quiera practicar un deporte en conjunto. Gracias a este deporte conocí a mi esposa, integrante del equipo nacional de Colombia», cuenta desde sus 31 años.

Patricia Passarella lo practica desde hace 10 años en Regatas de Santa Fe. «Tiene un sabor especial porque se ponen en juego aspectos de fisiología y de la física para poder sumergirnos», relata esta profesora y licenciada en Educación Física. Pía Rigacci, riojana de 37 años, agrega: «Me fascina la gran exigencia física que demanda y el trabajo en equipo, pero, sobre todo, ver el mundo a través del agua».

Nucleados en la Asociación de Hóckey Subacuático Argentina, los fanáticos de esta disciplina quieren competir en el Torneo del Hemisferio Sur y en el Mundial de Túnez. Claro que es todo a pulmón, bien amateur. Pero no claudican. «Cuanto más te metés, más te apasionás -asegura Ariel de Gracia, despachante de aduana de 35 años–. Luchás contra el adversario y los pulmones te piden aire. Tu espíritu no debe dejarse doblegar. Y eso es inigualable».

Claves

Los equipos. Están formados por seis jugadores cada uno que están provistos de aletas, lunetas y snorkels. Hay cuatro suplentes.    El objetivo. Trasladar por el fondo de la pileta hasta el arco rival, con un palo, un disco de plomo revestido en plástico.

La cancha. Tiene 25 metros de largo por 12,50 de ancho.

El palo. Tiene 25 centímetros de largo y está hecho de madera o plástico. Puede ser blanco o negro según el color con el que juegue el equipo.

Los arcos. Tienen tres metros de ancho y son una rampa con una canaleta donde debe entrar el disco para que se cobre el gol.

El partido. Se divide en dos tiempos de 15 minutos. Se puede jugar un alargue de 10.

Los árbitros. Son tres, dos en el agua y uno en el borde de la pileta (árbitro principal).

Las faltas. Van desde amonestaciones verbales y salidas temporarias del agua hasta la expulsión.

Fuente: Diario El Clarin. Argentina

Última actualización: 30 agosto 2019

2 comentarios

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.